Garganta de Escuain

Dejamos el coche en Escuain y después de una hora caminando por un sendero con una pendiente para recordar en la subida, llegamos al río que estaba bajo mínimos en su caudal, sin embargo, viendo el agua tan transparente que invitaba a refrescarse a pesar de lo fría que estaba, remontando el río saltando de piedra en piedra llegamos al hermoso salto de agua que aparece en la fotos, una excursión difícil de olvidar.